Tiempo Santa Lucía

14 noviembre 2012

Operativos para erradicar la droga en Santa Lucía



Trabajando por una ciudad segura y sana,  efectivos de la Policía de Corrientes distrito Santa Lucía realizaron ayer martes a las 20hs la detención de once personas de sexo masculino mayores de edad que consumían marihuana en distintos sectores de la localidad. Se efectuó un  sumario contravencional, el cual se realizó a raíz de que el peso de la marihuana no era suficiente para iniciar causa judicial, estando los 11 detenidos a disposición del magistrado interviniente a efectos de recuperar la libertad luego de pagar la contravención.

Lo importante del operativo realizado ayer es que la policía de Santa Lucía (según comentara su Comisario Julio Cesar Gómez) cumple con órdenes precisas del Gobierno Provincial, que ha solicitado erradicar la droga de las calles. El Comisario también recibía del gobierno local pedidos de trabajar sobre este flagelo, es por ello que los operativos no cesarán y se trabajará en conjunto con Gendarmería Nacional.

Es importante que la comunidad comunique a la policía cualquier información sobre  personas que consumen y/o venden drogas, colaborando con el trabajo investigativo de las fuerzas de seguridad, para dar con las personas que introducen la droga en la localidad.

 La marihuana daña el cerebro, memoria, sistema de locomoción y estado psíquico. Cuando una  persona siente la necesidad de consumirla, en realidad, esta ocultando algún problema más profundo en su persona y que por medio de esta droga trata de tapar, aunque sea momentáneamente. Si no se resuelve el problema de trasfondo, el consumidor esta expuesto no sólo a la drogadicción sino a otros temas también complejos como delincuencia, suicidio, enfermedades, embarazos no deseados, violencia, abandono de estudios, problemas laborales y un largo etcétera.

Las personas que consumen marihuana experimentan una sensación momentánea agradable de bienestar sin prestarle mucha atención al daño que pueden estar causándole a su cuerpo. La mayoría de los consumidores al haber cruzado la barrera y animarse a consumirla, luego de un tiempo, motivados por la curiosidad o el cambio de rutina sienten el deseo de probar con otras drogas cada vez más pesadas, acentuando así su deterioro físico y psíquico. Esto aumenta la probabilidad de que ocurra cuando el entorno (amistades, familiares o conocidos) consume y/o  se frecuenta ambientes o a personas que distribuyen estupefacientes que incitan a probar sus productos.