Alrededor de 100 alumnos, con diversas patologías, asisten a clases en el antiguo edificio del ex cine Apolo. No cuentan con los servicios adecuados. Desde Provincia se elevó un pedido de financiación para el proyecto de un establecimiento nuevo. La Comuna donó hace tiempo un terreno.
Los alumnos de la Escuela Especial Nº32 de Santa Lucía, continúan dando clases en el ex cine Apolo de la localidad. Con el constante apoyo de los padres y los docentes, se realizan algunas mejoras en el antiguo edificio, que no reúne las condiciones necesarias para que allí funcione una institución escolar, sobre todo, si se tienen en cuenta las diversas necesidades específicas que tienen sus alumnos. El proyecto para la construcción del nuevo edificio fue presentado por la Provincia ante Nación, para su financiación, junto al de la Escuela Especial de Gobernador Virasoro, y se aguarda respuesta.
Hace poco más de un año se publicó una nota en este diario, en la que se daba cuenta de las necesidades y de las carencias de espacios y de las deterioradas de las instalaciones.
A la escuela asisten alrededor de 100 alumnos con diversas discapacidades de Santa Lucía, sino también de Lavalle y otros parajes.
“El proyecto para la construcción de la escuela, junto a la de Virasoro, fue elevado a Nación, para pedir su financiamiento. Estaban los detalles de la obra y los costos. Hasta el momento no hemos tenido respuesta, ni han devuelto el proyecto”, dijo a El Litoral, Roberto Monzón, del área de Infraestructura del ministerio de Educación provincial.
Ante la falta de respuesta, Monzón señaló que se están analizando diversas alternativas a nivel provincial para que se puedan ejecutar los proyectos. Reconoció que legalmente, tampoco se puede intervenir en un predio privado, como es el de ex cine, donde se dictan las clases.
Más allá de cuestiones burocráticas, lo cierto es que los chicos con diversas patologías, precisan mejoras edilicias inmediatas, ante la falta de una escuela nueva. Sanitarios adecuados, aulas higiénicas y en buen estado, entre otras cuestiones que hacen a la calidad, no solo del aprendizaje, sino de vida.
Una de las falencias más evidentes, es el salón donde dan clases unos 12 chicos, que tienen una dimensión de no más de 3 por 4 metros.
La Comuna local realiza aportes y ha hecho algunas mejoras en el edificio.
Desde el Municipio, que donó el terreno para la nueva escuela, señalaron que se han efectuado gestiones ante la Provincia y que se cuenta con un compromiso del Gobernador, para arbitrar los mecanismos necesarios para que se pueda aprobar, con fondos provinciales, el proyecto de obra.
Vale mencionar que no es la única escuela especial que no cuenta con edificio propio y que funciona en condiciones no adecuadas para la actividad que deben desarrollar, de acuerdo a lo que requiere la enseñanza, de lecto-escritura y oficios, de los chicos que tienen distintas patologías.
La Escuela Especial Nº31 “San Benito Abad”, de San Cosme, que en junio pasado cumplió 8 años, funciona en un salón prestado por otro establecimiento local. Asimismo, la Escuela Especial de San Luis del Palmar, que durante años estuvo en un salón de la parroquia, ahora se encuentra en instalaciones cedidas por la Comuna.
FUENTE: El Litoral
