Uno de los mayores productores de Latinoamérica criticó la evaluación de la asociación Río Santa Lucía; apuntó contra la baja rentabilidad, la suba del trabajo en negro por los planes y las multas desde el Renatea. "Ojalá haya otra conducción del país", deseó, en las antípodas del referente Blanco, quien planteó la continuidad del Gobierno nacional como garantía del desarrollo del sector.
El productor Luis Piazza aseveró que la campaña hortícola, con eje en el departamento Lavalle, resultó "mayoritariamente negativa", a contracara de las declaraciones del presidente de la asociación Río Santa Lucía, Pablo Blanco al diario EL LIBERTADOR el martes 3, cuando emitió un balance preliminar "de regular a bueno".
Piazza es uno de los mayores productores de tomates y pimientos rojos del país y de Latinoamérica, acorde al ex titular de la asociación santaluceña, José Alberto Soto, y se refirió a las múltiples razones por las que el sector opera con una rentabilidad mínima y se necesita "un cambio de conducción nacional".
PROBLEMAS
Entre las principales razones del saldo negativo del sector, Piazza identificó tres puntos, primero la baja competitividad de los precios del mercado contra la inflación y los gastos de producción.
"El tomate se vende entre 2,5 y 3 pesos el kilo, y un cajón de 20 kilos a 60 pesos, y además hay que pagar gastos como el flete y las cargas sociales, que son terroríficas", disparó.
Sobre las cargas sociales se apoya su segundo reclamo, ya que las considera "muy altas" y al mismo tiempo pocos empleados "quieren estar en blanco, porque pierden los planes sociales", una problemática que afecta en similar medida a todas las economías correntinas, como la citrícola y maderera.
El tercer problema es una consecuencia directa del segundo, las constantes inspecciones del Registro Nacional de Trabajadores y Empleados Agrarios (Renatea).
"Te multan como si uno quisiera tener en negro a los empleados, a pesar de que se le explica una y otra vez que ellos mismos piden trabajar en esa condición o se mandan a mudar", relató.
Todos estos factores influyeron en lo que Piazza calificó como "una campaña mayoritariamente negativa", que en su caso particular lo mantuvo cuatro meses sin producción.
"No saqué nada en julio, agosto, septiembre y octubre", lamentó, y agregó que problemáticas similares se extienden a los productores de la zona, aunque no descartó que algunos hayan tenido mejores resultados.
El productor se mostró en contra de las políticas nacionales actuales para las economías regionales, y apostó por un cambio a nivel nacional.
"Ojalá haya otra conducción del país", deseó, en las antípodas del referente Blanco, quien planteó la continuidad del Gobierno nacional como garantía del desarrollo del sector.
Fuente: Powernoticias
