Familiares, amigos y vecinos se hicieron presentes en la vivienda donde vivía Ferreyra, ubicada por calle Lavalle entre calles Corrientes y Buenos Aires. Allí se veló al gendarme hasta las 18:30 aproximadamente, para luego dirigirse al Santuario Santa Lucía. Minutos mas tarde, se produjo el traslado hasta el cementerio local, en un clima de dolor y resignación.
Cabe destacar la presencia de personal local de Gendarmería Nacional y también de personal de Prefectura Naval. También se destaca la actitud del Concejo Deliberante, quien es sesión extraordinaria decidió sumarse al duelo nacional decretado.
